La asociación indica que las empresas están preocupadas por la debilidad de la economía española, la menor rentabilidad de las ventas y los elevados costes salariales
Las perspectivas económicas vascas para 2021 quedarán marcadas, en palabras del presidente de Confebask, Eduardo Zubiaurre, por “la alta incertidumbre sobre el futuro de la pandemia. En función de cuál sea su evolución definitiva, la horquilla de crecimiento para el año puede oscilar entre el 5,0 y el 8,5 por ciento”. La asociación, sin embargo, confía en que, finalmente, se produzca “un crecimiento intenso del 7,2 por ciento, aunque sin recuperar todo lo perdido en 2020, para lo que habrá que esperar hasta 2022”.
En cuanto al empleo, los pronósticos de Confebask apuntan mayor moderación. Zubiaurre anticipa que “la variación prevista de nuevos afiliados será muy contenida”, sobre unos 5.000 más, por lo que el paro se mantendrá sobre el 11 por ciento. El estancamiento se deberá a que “buena parte de la necesidades de empleo se cubrirán con la vuelta al trabajo de las personas en ERTE, que todavía son unas 30.000”.
4 de cada 10 empresas seguirán en recesión a seis meses vista
La evolución por sectores, por su parte, apunta a un claro desacople por actividades, aunque “casi todos experimentarán una clara mejoría, encabezada por el sector privado de servicios, aunque las actividades ligadas al ocio y al turismo lo harán más tarde. Construcción e industria también crecerán con intensidad, aunque en ramas como oil&gas o aeronáutica la recuperación llegará asimismo con más retraso”.
En este escenario complejo, los responsables de Confebask indican que los principales factores de preocupación de las empresas vascas son “la debilidad de la economía española e internacional, el descenso de la rentabilidad de las ventas y los elevados costes salariales”. Para paliar su efecto, las medidas requeridas inciden en “los acuerdos de flexibilidad laboral interna, la reducción de cotizaciones y el mantenimiento de los ERTEs”.
Como referencia de la situación, desde Confebask destacaron algunos resultados de las encuestas realizadas por las organizaciones territoriales asociadas: Mejora la percepción del mercado a seis meses vista, aunque todavía 4 de cada 10 empresas manifiesta que seguirá en recesión. La situación es complicada en cuanto a cartera de pedidos, uso de la capacidad productiva, facturación y exportaciones. Dos de cada diez empresas ya han recuperado su nivel de actividad normal, cinco esperan que se produzca en seis meses y tres que tardarán más de un año.
El director general de Confebask, Eduardo Arechaga, por su parte, insistió que la salida de la crisis actual exige superar los restos sanitario, económico y social e incorporar la resiliencia como factor para “responder mejor ante situaciones análogas, si volvieran a darse en el futuro”. Por ese motivo, detalló las recomendaciones de Confebask, que, en el caso de la empresa, pasan por “asegurar la supervivencia de las empresas, tener planes de contingencia realistas y actualizados y definir primero y abordar después una agenda empresarial transformadora en la tres transiciones que el Covid va a acelerar: la tecnológica, la medioambiental y la demográfica- sanitaria. También aseguró que “ahora más que nunca es necesario el diálogo social para lograr diagnóstico compartido y lograr acuerdos y consensos de calado que permitan salir de esta crisis.
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