La entidad destaca la importancia de la actividad comercial y del negocio recurrente en los resultados de 2021
FOTO:
Kutxabank ha culminado en 2021 sus diez primeros años de historia -nació el 1 de enero de 2012- con la consolidación de todos los pilares del negocio bancario: solvencia, liquidez, eficiencia y diversificación geográfica y comercial. Las palabras del presidente de la entidad, Gregorio Villalabeita, aclaran cualquier duda: “2021 fue para nosotros un ejercicio muy notable, con una fortaleza reconocida por los diferentes organismos supervisores, que volvieron a situar el perfil de riesgo, la solvencia y la capacidad financiera de Kutxabank entre los mejores de Europa”. La dedicación a cumplir los requerimientos de la supervisión, además, no frenó la diversificación de las fuentes de ingresos, clave para navegar en un mar sin profundidad de tipos. El consejero delegado de Kutxabank, Javier García Lurueña, pone en valor que, “ante un escenario de gran incertidumbre, nos marcamos unas metas ambiciosas, pero la organización las cumplió prácticamente todas. Fue fundamental que la actividad comercial batiera récords históricos en áreas clave, con un comportamiento muy por encima del mercado”.
La expansión comercial en 2021 se confirmó con “el alza del 8,2 por ciento de los ingresos bancarios recurrentes”. La venta de productos de balance y de fuera de balance sumaron recursos. Así, la inversión crediticia productiva repuntó un 7,5 por ciento; la contratación de nuevas hipotecas, un 18 por ciento; y los préstamos a empresas e instituciones, un 20 por ciento. Desde Kutxabank destacan que “nos situamos a la cabeza del sector por la capacidad de diversificar ingresos, gracias a la mejora de las cuotas en fondos de inversión (2.579 millones netos de crecimiento, 10% del mercado español), carteras delegadas de ahorro-inversión (3.200 millones y alza del 34%) y productos de previsión (6.315 millones de patrimonio, 6% de alza y 48,8% de cuota en el País Vasco).
Al mismo tiempo, el negocio asegurador, con la comercialización de 125.000 nuevas pólizas (+10,4%) y un stock de 925.000, aportó 160,2 millones de euros a la cuenta de resultados, con un avance anual del 5,2 por ciento.
La penetración en áreas de empresas también arrojó resultado positivo. Desde la entidad señalan que “la inversión en activos fijos alcanzó 204 millones (+8,5%) y la demanda de avales para licitación de proyectos y equipos industriales se incrementó en un 23 por ciento, mientras que la cobertura de divisas en el comercio internacional lo hizo en un 14 por ciento”. La digitalización y los nuevos servicios y productos para este canal propició que, al cierre de 2021, el 57,3 por ciento de los clientes fueran usuarios digitales, porcentaje que se elevó al 70 por ciento en los de banca personal.
Los accesos a canales digitales sumaron 254 millones (+19%), con la característica de que el 90 por ciento lo hicieron a través de teléfonos móviles. Los canales digitales resultan imprescindibles para compensar el ajuste de la red física e incidir en el control de los gastos. Este factor se confirmó en 2021 con un recorte del 5,5 por ciento, que se elevó hasta el 30 por ciento en la última década. Esto supuso un ahorro anual de los gastos de explotación de 155 millones en 2021 sobre 2012, y absorber parte de la pérdida de 192 millones del margen de clientes y de 355 millones del margen de intereses.
Por tanto, si Kutxabank no hubiera sido capaz de revolucionar su gestión y ampliar el perímetro geográfico y el catálogo de productos, su posición no hubiera sido tan boyante diez años después. En esta década, hay que recordar que esta transformación se compatibilizó con la reducción de la mora del 8,30 por ciento en 2012 al 1,86 en 2021; y con alzas de la tasa de cobertura del 75,7 al 96,3 por ciento y del ratio de capital principal, del 10,2 al 17,7 por ciento. Al mismo tiempo, los fondos propios escalaron de 4.980 millones en 2012 a 5.802 en 2021.
Todos los derechos reservados Industria y Comunicación S.A.