Trabaja en el desarrollo de una tecnología basada en corrientes electromagnéticas con el fin de recuperar la arena utilizada en el moldeo
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Tecnalia ayudará al sector de la fundición a dar un paso al frente hacia la economía circular a partir del proyecto Hormiga, marco en el que desarrolla una tecnología para la revalorización de residuos arenosos para su posterior utilización en las propias fundiciones. Según explican desde el centro tecnológico, solo se recupera un 35 por ciento de la arena utilizada en las fundiciones, de manera que 150.000 toneladas de arena acaban en los vertederos. Una alta tasa que Tecnalia trata de reducir con el desarrollo de una tecnología que permita recuperar la arena empleada en el moldeo para reutilizarla en las propias fundiciones a partir del uso de corrientes electromagnéticas. De esta manera, posibilita que el grano de arena no se rompa y se mantenga estable, facilitando su recogida y posterior reutilización.
El proyecto Hormiga está liderado por Furesa
En línea a sus investigaciones, la estabilidad de los granos de arena tendrá un importante impacto en los procesos productivos de las fundiciones, ya que facilitará la recogida de la arena y su posterior utilizacion en la propia planta, reduciendo el consumo de materias primas y permitiendo controlar la calidad de la arena desde las propias instalaciones. Al mismo tiempo, reducirá las emisiones de CO2, de manera que permitirá a cada empresa alinearse con los objetivos medioambientales de forma más eficiente. Una solución flexible La tecnología se testará en las siete empresas que conforman el consorcio del proyecto: la fundición Furesa, que actúa como líder de la iniciativa, Castinox, Amurrio Ferrocarril, Gamarra, Grupo Wec, Alju y Foseco. Ya que cada fundición utiliza diferentes materiales y tecnologías para el moldeo, todas esas características serán tenidas en cuenta para el diseño de un sistema flexible que ofrezca soluciones adaptadas según sus necesidades, explican desde Tecnalia. El proyecto, que tiene previsto finalizar el próximo ejercicio, comprende ensayos de laboratorio, el diseño del sistema y del horno necesario y el apoyo en la fabricación de la instalación prototipo en las empresas participantes. Además, se contempla la realización de pruebas en los diferentes prototipos y la colaboración con las validaciones en las propias plantas de fundición adheridas.
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