Pintuberri revolucionará la aplicación de pintura en polvo con la automatización de sus procesos, un proyecto que explorará durante el presente ejercicio con un sistema de colgado robotizado de piezas a bastidor, mediante el uso de visión artificial. Como explica su gerente, Josu Gabilondo, se trata de un nuevo paso de la compañía hacia la fabricación avanzada tras emprender su digitalización seis años atrás, lo que “puede suponer un punto de inflexión y un cambio absoluto de nuestro proceso productivo en un sector en el que la robotización no es lo habitual”. La compañía implantará en el primer tramo del año un primer colgado robotizado de piezas a bastidor desde un cestón en ‘caótico’, tal y como llega del cliente. En un principio, el proyecto se iniciará con una gama de 20 referencias, la primera de ellas a integrar a producción en los próximos cuatros meses. De este modo, esperan un mejor posicionamiento en el segmento de pintado de piezas pequeñas, lo que repercutirá en el consiguiente incremento de la cartera de pedidos, además de resolver los problemas de ergonomía que comporta la manipulación de determinadas piezas pesadas.

Iniciará el proyecto con una primera gama de 20 referencias

El proyecto se complementará con la automatización de cambio de bastidores entre cadenas, cuya adjudicación se consumará en el primer semestre del año. Como explica Gabilondo, cuentan con cinco cadenas auxiliares y una principal, de modo que el movimiento de bastidores entre todas ellas les reportará una mayor flexibilidad a los trabajos del robot al contar con un pulmón de bastidores mayor, lo que también posibilitará la robotización de un mayor número de referencias. Incursión en la IA Pintuberri emprendió su transición digital en 2019 con la sensorización de todos los parámetros de proceso de la planta, una inquietud que le ha permitido obtener y registrar valores de temperatura, presión, velocidad de la línea de pintado, pH o conductividad. Todo ello asociado al registro de imágenes de las piezas a lo largo del proceso. En la actualidad, los próximos pasos que dará estarán encaminados a explorar nuevas posibilidades ligadas al mantenimiento predictivo, así como la introducción de inteligencia artificial. En este último caso, el objetivo es realizar un mejor análisis de los datos que captan sus sensores para detectar, por ejemplo, un incremento del consumo energético o de producto químico injustificado. La apertura de miras de Pintuberri hacia la fabricación avanzada le ha llevado a incrementar significativamente su facturación desde que iniciara su transición digital, un paso que ha avalado su cartera de clientes ligados a sectores como la automoción, electrodoméstico, sector eléctrico y construcción. Como afirma Josu Gabilondo, “la digitalización y la robotización de las fábricas no es ya una opción, es una necesidad. Quien no lo vea así, se verá fuera del mercado en el corto plazo".