Composite Patch, empresa especializada en el desarrollo de soluciones de reparación de composites para diversos sectores, continúa su plan de crecimiento mediante la ampliación de la gama de producto y la incorporación de dos nuevas líneas de soluciones focalizadas en la industria eólica. Por un lado, la compañía se encuentra inmersa en un proyecto de I+D, respaldado por el programa Hazitek del Gobierno vasco, para el desarrollo de una solución de reparación con resinas ‘bio’ que contribuirá a la reducción de la huella de carbono. Por otro, el segundo desarrollo, actualmente en proceso, está basado en una resina que incorpora aditivos de curado ultravioleta que agiliza el proceso de reparación de las palas del aerogenerador, llegando a realizar ciclos de curado de 15 segundos.

En esta línea de innovación y con el reto de avanzar en su estrategia de sostenibilidad, la compañía guipuzcoana también participa, junto a la estadounidense TPI Composites, en el proyecto de I+D, Rewind, enmarcado en el programa europeo Horizon 2030. El proyecto tiene como objetivo el desarrollo de resinas y fibras 100 por ciento reciclables y su aplicación en las soluciones de reparación en 2026, tras la fabricación de los prototipos en las instalaciones de Composite Patch, en el Parque tecnológico de Miramón, donde disponen de equipos de dosificación, corte, preparación de fibra, etc.

‍Álvaro Pipó, cofundador de Composite Patch y propietario de la ingeniería Prosix, ha explicado a Empresa XXI que la compañía surgió en 2011, como una spinoff de la alianza entre Prosix y uno de los principales formuladores de resina europeo, para comercializar los productos resultantes de la actividad conjunta de ambas empresas.

Integra toda la cadena de valor

Los sistemas de reparación estructural desarrollados duranste este tiempo en Composite Patch están “específicamente diseñados para las reparaciones en campo y en todo tipo de clima”, e indicados para sectores industriales como el militar, el de tuberías, energía eólica y aeroespacial. Ahora, 13 años después, la compañía ha dado un “salto de gigante” al integrar toda la cadena de valor de la solución de reparación desde el análisis de la necesidad, cálculo, desarrollo y validación del producto, convirtiéndose en certificador del arreglo, y del propio cliente. Composite Patch, que se prepara para afrontar la época de mayor carga de trabajo en el hemisferio norte, es suministrador oficial del sistema de reparación de la Volvo Ocean Race, también utilizado en parques eólicos en Europa y América; y ha realizado las primeras pruebas para reparaciones de emergencia en órbita en misiones espaciales.

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