La producción de vehículos retrocede un 1,5% hasta agosto
La incertidumbre y la cautela rondan el futuro comercial e industrial de la automoción en España. La cuestión de los aranceles impuestos desde Europa a los vehículos de China ha marcado la 1ª Cumbre Hispano-China de Automoción, organizada por Faconauto y la Asociación de Concesionarios de Automóviles de China, donde se subrayó “la importancia de mantener relaciones comerciales sólidas entre ambos países para seguir atrayendo inversiones al sector automovilístico nacional”. Durante la Cumbre, la presidenta de Faconauto, Marta Blázquez, indicó que “todo apunta a que los fabricantes chinos no solo buscan comercializar sus productos en Europa, sino también integrarse plenamente en el tejido industrial español”. Por lo que Europa debe establecer “reglas de juego claras, justas y equilibradas” que permitan una integración efectiva de las marcas chinas en el mercado europeo, sin comprometer la competitividad de las empresas locales. Más de 300 concesionarios comercializan actualmente marcas chinas y suman el 4 por ciento del mercado. Y las ventas de automóviles no acaban de despegar.
Tras el frenazo de agosto, las matriculaciones acumulan un alza del 4,5 por ciento en ocho meses respecto al mismo periodo de 2023, hasta las 671.551 matriculaciones. Un comportamiento que flojeó más en el mercado de turismos electrificados, al retroceder un 1,7 por ciento y cubrir un 10 por ciento del mercado total. A pesar del alza del canal de particulares, que supuso el 60 por ciento de las ventas respecto a otros canales, fabricantes y concesionarios ven lejos la meta del millón de unidades fijado para final de año. Por su parte, la producción suma un retroceso del 1,5 por ciento en ocho meses, hasta 1,58 millones de vehículos, los cuatro últimos ininterrumpidos. Una situación extensible a los electrificados, que caen un 2,8 por ciento respecto a un año antes.
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